Todas las personas cuando estamos trabajando, ponemos en práctica unas habilidades que nos lleva a evolucionar y a desarrollarnos profesionalmente; es por esto que, para acceder a los trabajos nos requieren un mínimo de experiencia. Trabajando no sólo ejecutamos y damos resultados, sino que aprendemos a dar respuestas y nuestro repertorio de recursos profesionales-personales se va ampliando o se va actualizando. Con ello crecemos profesionalmente. Eso sí, para ello hay que tener capacidad y ponerle ganas.
Cada vez que logramos algo, hay una habilidad técnica o profesional que se ha puesto en práctica, y si se repite esta habilidad en varias ocasiones, la podemos reconocer como nuestra fortaleza. A veces, estamos tan pendientes de nuestro día a día, o incluso tan centrados en los problemas o las dificultades, que no somos conscientes de lo que si hacemos y conseguimos.
Nuestras fortalezas son esos superpoderes que muchas veces vemos en los superhéroes y superheroínas: «El hombre araña» con su gran habilidad es columpiarse con el hilo de araña, «Batman» que utiliza una capa para planear y sorprender, «Superman» con su capacidad super humana en los 5 sentidos, o la «Mujer invisible» que puede hacerse invisible a ella ya los demás.Todas las personas tenemos algún superpoder, una fortaleza, seguro que si.
Algunas preguntas para descubrir nuestros superpoderes:
- ¿Qué he logrado esta semana? ¿qué he logrado en este último mes, medio año y un año? He negociado con un proveedor y ha salido ok, he terminado una pieza de mecanizado para un cliente, he conseguido llegar a los objetivos de trabajo, he conseguido un nuevo trabajo.
- ¿A qué habilidad técnica o personal se ha debido cada uno de estos logros?.
- Y si junto todos los logros ¿qué capacidad es la que coincide para conseguir esos logros? Estas son mis fortalezas (mis superpoderes) que nos basamos en nuestros logros, en aquello que conseguimos. Mi habilidad de persuasión, mi alta capacidad de observación y minuciosidad, mis constancia o capacidad de seguir los tiempos, mi adaptabilidad a las nuevas demandas.
Y si nosotros tenemos estos superpoderes, las demás personas también los tienen: nuestros compañeros/as o de las personas que tenemos a nuestro cargo:
- ¿Qué ha conseguido mi compañero o trabajador en esta semana? ¿en este mes, en este año?
- Qué habilidad técnica o personal es la que pone en práctica.
- ¿Le reconocemos sus fortalezas a los demás?. ¿Se lo comunicamos?
Una vez que has descubierto tu superpoder y que con él ha sido posible conseguir los logros hasta ahora, ¿es posible que desarrollemos otros superpodres en el futuro? Si, si sabemos aprovechar nuestra potencialidad.
La potencialidad es la habilidad que tenemos y que puede ser aún más desarrollada aún o aprovechada. A veces son conocimientos, habilidades técnicas o habilidades personales, que he tenido pocas ocasiones para practicar y por lo tanto, no las tengo muy ejercitadas.
- La pregunta es ¿Qué es lo que estoy haciendo ahora y que si lo hiciera más veces conseguiría un mejor resultado? ¿Qué es aquello que sé o sé hacer y que si lo practicara más me llevaría a un logro?
- Ahora hacemos lo mismo con los compañeros o trabajadores ¿Qué más sabe o sabe hacer esta persona y que puede ser aprovechado para mejorar o cambiar los resultados en la empresa? Reconocemos las potencialidades de los demás ¿se lo comunicamos?
Aquí nos quedamos con este trabajo de reflexión, y para que tenga una utilidad práctica lo tenemos que hacer de manera consciente y aprovecharla, para mejorar profesionalmente y personalmente, pero también para avanzar como equipo o como empresa.
Al final el trabajo sale adelante por la unión de todas las fortalezas y por permitir el desarrollo de las potencialidades de las personas que están en las empresas.
Aquí estoy hablando de este tema en el el programa Àgora de RadioAlcoy-Cadena Ser
http://www.radioalcoy.com/Home/Player/40196
